¡ESTRENAMOS!

EL SABADO 7 DE SEPTIEMBRE FUE LA PRIMERA FUNCION DE MUCHAS FUNCIONES QUE SE AVECINAN. Salio Bien estamos contentos y los esperamos a que vengan a ver la Version renovada de ARRUGADOS COMO JACK una ABSURDA COMEDIA POLICIAL

Fotografias





El proyecto

“Arrugados como Jack” es una mirada nostálgica de aquellos sueños que jamás cumplimos. Un cine que ya no existe. Dos personas sufriendo por un pasado irrevocable. Una mujer que no distingue el pasado del presente, que no recuerda. Un pasado enorme que cuanto más pasado es, más gigante se hace. Una obra que habla de nosotros, de nuestra realidad, tan absurda a veces que no la podemos explicar. Sólo podemos dejar que fluya como cuando un recuerdo vuelve y lo creemos real.
“Arrugados es… y será así, un bollo de papel que se va alisando de a poco con tiempo, con paciencia, con cuidado, teniendo en cuenta que si tiramos se rompe y si lo dejamos no sabremos que dice. Es un proceso de alisado, de aceptar las marcas del papel doblado, de buscar las formas de desplegar esa historia que quiere ser contada.

Sinopsis


La historia transcurre en un cine abandonado donde se encuentran después de un tiempo, interminable para ellos, los protagonistas: El (y su Bombin), Ella (y sus anteojos). Ambos están marcados, enojados, signados, nostálgicos de sí mismos, por un hecho que no pudo ocurrir de otra manera. Es allí, entre el dolor, las miradas, los olores, y las arrugas, como poco a poco se van reconociendo nuevamente; y permiten reconstruir ese pasado que los identifica.
Tanto él como ella empiezan a vivenciar en carne y hueso, con movimientos, con tonalidades, exactamente lo que ocurrió cuando se conocieron muchos años atrás en ese mismo cine. Ese pasado se vuelve nuevamente presente.
Inesperadamente una mujer desconocida (con grandes problemas de memoria) llega con un objetivo muy claro, pero sin tener idea de lo que tiene que hacer para cumplirlo. Es en este juego de confusiones como la mujer irrumpe en el cine, generando así, un desenlace inesperado.

Objetivos del proyecto

El proyecto surge a partir de la investigación de diferentes obras cercanas a la estética del absurdo. Fue así como el grupo comenzó un primer período de improvisación y contraste de los diferentes disparadores dramáticos. Pocos elementos quedaron, pero fueron claramente los motores para lograr confrontarnos con nosotros mismos y generar una historia y una estética propias.
Arrugados como Jack es simplemente una experimentación en donde tanto la autogestión como la creación parten del grupo.
Uno de los objetivos concretos que tuvimos en el proyecto, era la intención de colocar el pensamiento y la acción del personaje en simultáneo en la escena. Buscamos crear complicidad con el espectador dándole a conocer los lugares más remotos de esos personajes, sacando así a la luz las máscaras que se nos presentan frente a diferentes situaciones sociales.
Trabajamos desde una estética cercana al absurdo. Un absurdo modificado, que por momentos dice lo que quiere y por otros se disciplina a lo que hay que contar.
Apuntamos a un público joven-adulto, creemos y estamos convencidos de que esta obra, los identificará. Nosotros somos una generación que busca constantemente una identidad, un lugar, una forma de pensar, pero nos cuesta mucho encontrarla, hay un pasado oscuro -“absurdo”- que no vivimos, que nos marca y nos marcará por siempre. Hablar de él se nos hace difícil, porque no lo conocimos; sólo podemos contar lo que nosotros sentimos. Somos ese resabio del pasado.

La puesta en escena

La puesta en escena, como así también el diseño escenográfico, están en una constante búsqueda de resignificación del espacio escénico. Nuestra intención es lograr un paralelismo, entre la escena y el público; a partir de diferentes componentes el espectador comenzará a participar de la obra de una manera activa. Buscamos que se sienta incluido en aquello que ve.
Primero y principal, necesitamos un escenario cercano al espectador. Es el espectador el que tiene que estar elevado en gradas, y no debe haber un pasillo central, sino mas bien dos pasillos laterales.
En las gradas, estarán ausentes (en los mismos espacios) aquellas dos butacas, que se encuentran en el escenario. En el suelo del espacio escénico, se formará en madera una falsa escuadra, empezando en el panel posterior y terminando justo con las dimensiones de las gradas. Así, logramos un falso espejo de lo que sucede en escena y en el público, dejando entendido que aquellas dos butacas faltantes en el público se encuentran en escena, y las butacas faltantes en la escena, se encuentran en el público. Este recorte escénico, estará debidamente señalado por luces en distintos momentos de la obra.
Otro de los recursos utilizados está en el programa de mano. En la tapa del mismo, se encontrará la Frase “Momentos de una vida miserable”. Mientras que en la parte posterior, todos los datos de la obra. Esta frase, es de gran importancia en la comprensión de la obra, y fue la invitación que el personaje de Él recibió para ir a ese cine. Es ese cine en donde los personajes están, donde el espectador también fue invitado.
Para entrar a la sala, el espectador debe tener esa tarjeta de invitación, pero no necesariamente tiene que entender para que la tiene. Es el espectador quien descubre lentamente el por que tiene esa frase, y que significa tanto para él como para los propios personajes el tenerla.

Bocetos de Vestuario


Para crear el vestuario trabajamos en conjunto con la vestuarista sobre dos conceptos principales presentes en la obra. Uno es de la atemporalidad, y otro es el del pasado y el presente que se mezclan, se cruzan y hasta se confunden… ya sea viviendo lo ocurrido o no pudiendo recordar con claridad los detalles.
Sobre estas ideas se concibieron sobre todo los vestuarios de EL y ELLA. Los “trajes” pueden pertenecer a cualquier época, pero tienen ciertos detalles (el bombín en el caso de EL, el casquete y los anteojos en ELLA) que denotan alguna ligazón con el pasado, reforzando otra de las ideas de la obra: la de no poder escapar a la nostalgia, a los recuerdos, a aquello que alguna vez consideramos “nuestros años dorados”. Los colores son oscuros en general, salvo detalles en blanco o crudo como un collar, la cartera, la camisa de EL; no hay colores estridentes ni llamativos en sus vestuarios. Así, trabajamos con la atemporalidad y el estancamiento en el pasado, como si los personajes fueran parte de una fotografía en blanco y negro (que se añeja con el tiempo), siempre atados a esa imagen.
Por otro lado, el personaje de la mujer, que en la obra irrumpe inesperadamente, también lo hace con su vestuario. Tiene algunas pinceladas más de color y elementos más contemporáneos, como las medias de red, los tacos, el piloto entallado. Sin embargo, conserva otros como la boquilla o el corte de pelo que nos llevan claramente a otra época, aunque no del todo definida, para no situarla en un momento en especial… ella está perdida en sus recuerdos, tiene “problemas de memoria”.
Por sobre estos conceptos que se enlazan con lo que la obra quiere contar, que son las ideas fundamentales, sobrevuela una estética que quisimos darle a los personajes, que es cercana a la del Comic. Personajes bien delineados, definidos y diferenciables entre sí. El tratamiento del blanco y negro que recortan claramente las figuras y el uso de los colores plenos, tan característicos de los muñequitos que encontrábamos dentro del Chocolate Jack. El vestuario, de esta forma, también está contando la historia… nos habla de la nostalgia, del recuerdo, del no-recuerdo, de aquel pasado del cual no podemos escapar y que revivimos sin darnos cuenta en el presente

Ficha Tecnica

Actores:
El: Juan Pablo Galimberti
Ella: Soledad Bautista
Mujer: Marina Fantini

Diseño Escenográfico: Mariela Iuliano
Iluminación: Mariela Iuliano
Autor: Juan Pablo Galimberti
Dirección: “Arrugados”